Cadete Wells

Nombre: Katrina Joanna Wells
Edad: 400 Años
Raza: Chucha
Fecha de Nacimiento: 14 de Marzo de 1610

Descripción Fisica: Cabellos de color castaño con reflejos rubios hasta media espalda, brillantes y ondulados, da la sensación de que siempre está mojado, sus ojos tan misteriosos como brillantes, de un extraño color amarillo denotan su fuerza tanto física como mental, su nariz ligeramente alargada le dá un aspecto meláncolico y cansado, sus labios, ligeramente carnosos suelen presentar un color entre rojo cereza y rosa común, piel tersa no demásiado bronceada, cuerpo firma y márcado, destacán sus marcadas cáderas y su provinente tracero, así como su vientre plano. De aspecto salvaje e imponente siempre suele vestir con ropa cómoda, unos caqueros, una camisa de algodón y poca cosa fuera de lo normal, no suele usar máquillaje normalmente lo que le dá un aspecto mucho mas sano que el de la mayoría de las mújeres.

Descripción Psiquica: Es una mujer muy fuerte psicologicamente, capaz de conseguir cualquier cosa que se proponga. Es fria y muy astuta siempre tiene dos razones para hacer cualquier cosa y una de ellas siempre es incorrecta. Es muy curiosa y misteriosa, está rodeada de secretos. El poder le pierde y esa es la única razón por la cual no se marcha de la mánada. Es perfeccionista al estremo: necesita sentir que todo marcha bien para sentirse a gusto. Elegante e ingeniosa hasta el extremo y portadora de una gran sensualidad.

Objetos: Una colección de antiguos sables italianos con algunos diamantes en el filo, robados. Una PDA donde anota todo, incluido su diario. Un guardapelo con la foto de una niña , mi difunta hija de hace mas de 300 años: Evelyn.

Historia personal: Nací hace 400 años en una época donde las mújeres eramos únicamente instrumentos para tener, cuidar hijos y mantener la casa limpia, en una época donde el dínero podía comprarle a más de uno un titulo, así como el que yo tenía, un titulo que usualmente conseguían también por el antiguo método del matrimonio, la iglesia católica comenzaba a carecer de importancia en esta época y el lenguaje inglés empezaba a cobrar más fuerza día tras día, el arte iba cambiando lo llamaban "Renacimiento" o eso descubrí con el paso de los años, pues en aquella época me temo que no era más que una simple campesina: Katrina Joanna Pegg, hija de un ukraniano y una burguesa que entregó toda su dote con la esperanza de obtener el titulo que Adler, mi padre le decía que poseia, mentirás y mas mentiras para sobrevivir y, entre esa red de mentiras téjida con tal cuidado que asustaría nací yó, no deseada por ninguno de los progenitores no recibí nombre hasta los tres años, recibiendolo de una vécina, que, preocupara por mi estado decidió adoptarme, mis padres pidieron a cambio ápenas dos o tres piezas de gánado así pasé, a una familia repleta de amor que me consideraban su centro, su piedra bónita ... siempre fué así, mi padre, el adoptivo me dió la misma educación que a los hijos de su propio linaje y em eneseñó el noble arte de la espada, a tal punto llegaba mi mánejo con esta que a los 17 años me marché de cacería con los chicos de la aldea ... fue entonces donde conocí a Caius, era de casta noble, sus padres descendían de la monarquía directamente solo que deseaban una vida tranquila y por ello se habían mudado aquí, por aquel entonces pensé que la fuerza que desprendia al tirar de las riendas o batir la espada era únicamente por su forma física pero cuando descubrí tiempo mas tarde cuando tras el cortejo previo me casé con él que no era del todo húmano casi creí haber perdido la cordura y ser víctima de juegos de Satanás, pero entonces me mordió, con esto deño añadir que nada me ha dolido mas a nivel físico en esta vida que mi transformación, lenta y dolorosa si las había, como todas como descubrí mas tarde, Caius y yó fuimos compañeros durante unos años, años para los que no pasaba el tiempo en nuestros rostros y, con el roce hay cariño pero no el que una mujer necesita eternamente, adopté a una niña en una de mis salidas habituales para pasear por el bosque de noche, estaba sola y perdida, sus padres habían muerto y ella aún se abrazaba a su madre, Evelyn la llamé, cuando volví a casa con la niña Caius estaba furioso y bebido, no pudo controlarse y transformado mató a Evelyn con sus propios colmillos, luego yó lo maté a el, pasaron años hasta que pudiera recuperarme de aquel hecho, de haber perdido a las dos únicas personas que verdaderamente me importaban en la actualidad, pasé añós escóndida en mi vieja vivienda de la infancia reviviendo toda clase de recuerdos negativos y, una vez que fuí capaz de afrontarlo me retiré hacía París, la capital donde con el dinero que había logrado robar de una de mis víctimas pedíria que me hicieran un guardapelo de mi pequeña, usando como imagen un retrato que yo misma había pintado de ella, totalmente semejante, era buena pintora pero nunca me apasionó demasiado ese arte. Una vez obtenido mi guardapelo vagué por el mundo aprendiendo las nuevas constumbres, estudiando las distintas ciencias e incluso pasé un tiempo en un convento para estudiar la religión de su lado mas cercano, estuve perdida mucho tiempo hasta que encontré a Lucían en Dinamarca y el me presentó a la mánada, desde entonces vivo aquí con ellos, como una más, sintiendome parte de la familia.

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